El síndrome manos, pie y boca casi siempre es ocasionado por el virus Coxsackie y provocará que tu hijo tenga erupciones cutáneas como ampollas en las manos, los pies y la boca.
La enfermedad de manos, pies y boca es una enfermedad contagiosa muy común en niños de entre 3 y 7 años porque todavía no tienen inmunidad total contra los virus que causan la enfermedad.
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Los principales síntomas son: Fiebre, pérdida del apetito, dolor de garganta, sensación de malestar, llagas dolorosas en la boca, que normalmente comienzan como puntitos rojos planos, especies de ronchas en la palma de las manos, la planta de los pies, pero también podrían aparecer en rodillas o codos.
Cabe señalar que hay niños que no presentan síntoma alguno y las llagas sólo aparecen de manera repentina y por lo general no tienen complicaciones excepto las antes mencionadas.

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Un niño puede contagiarse por estar en contacto con un juguete infectado, con la herida de un niño con el virus, por estornudos, tos e incluso por contacto con un cubierto o plato que haya sido utilizado por alguien enfermo.
El tratamiento recomendado será muy sencillo, ya que sólo podrá tomar algún medicamento indicado por el doctor para controlar la fiebre. Sin embargo, los padres deben estar muy pendientes de que su hijo coma, siempre esté hidratado, no se rasque, tener limpia la zona afectada y principalmente no exponerse al sol o comer cosas que puedan ser irritantes.
Este virus se puede transmitir de adulto a niño, es por ello que se debe tener muchísima higiene para evitar propagar en la familia.
El virus se puede transmitir con mayor facilidad durante la primera semana y después de dos semanas de que hayan desaparecido los síntomas.