- En cuanto empiece el año escolar, revisa el calendario de días libres para que puedas planear con anticipación y comprar con tiempo. Recuerda que te ayudará a obtener una mejor tarifa.
- Reserva boletos en vuelos con horarios compatibles con los horarios de tus hijos, sobre todo los más pequeños. De ese modo tendrás menos inconvenientes antes, durante y después del vuelo. Comenta en la aerolínea que viajarás con niños o bebé, muchas asignan asientos especiales y te dan recomendaciones para que viajen más cómodos.
- Si todavía usa pañal, vístelo con ropa cómoda que sea fácil de quitar; si amamantas, usa una blusa que te permita darle pecho fácilmente.
- Empaca sólo lo necesario, aunque “necesario” implique llevar varios cambios de ropa, comida especial para el bebé y un botiquín “básico” con pastillas antimareos, para el dolor de cabeza y diarrea. ¡Nunca están de más! Toma nota de este checklist para que sea más fácil.
- Revisa el clima del destino que eligieron para que las lluvias o frío no los sorprendan.
- Lleva siempre entretenimiento para el avión, autobús o coche. Una película o un libro para colorear les hará más tranquilo y rápido el vuelo.
- Sin importar el destino, hospédense en hoteles todo incluido, así no tendrás que preocuparte por buscar dónde comer y ahorrarás en transporte. Planea con anticipación las salidas por si hay que comprar boletos desde antes.
- Toma muchas fotos para que tus hijos revivan el momento cuando sean grandes. Ellos crecen rapidísimo y pocos meses después verán todo desde una nueva perspectiva.
- Si van a la playa, lleva bloqueador solar en spray que es de más fácil y rápida aplicación.
- Para paseos fuera del hotel, lleva snacks que les alivien el hambre.
- Procura mantener una actitud abierta y relajada para que disfrutes el viaje. El orden puede esperar.
- Diviértanse mucho, los recuerdos quedarán impresos para siempre en su memoria.