1. ¿Le has preguntado a tu hijo si es feliz? No dejes pasar más tiempo sin preguntarlo.
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2. Uno de los grandes males es tenerle miedo a nuestros hijos. Quítate el miedo de ser autoridad.
3. Ten muy claro qué sí y qué no vas a permitirle. Así evitarás caer en chantajes.
4. Es súper válido negociar con él, pero ¡ojo! al final tú eres quien decide. Tú tienes la última palabra.
5. Escucharlo no significa que debas hacer todo lo que te pide o darle todo lo que quiere. Escuchar no es ceder.
No seas tan duro contigo mismo. También reconoce qué has hecho bien como mamá o papá.
6. ¡OJO! Una cosa es ser un papá amigable, cercano, que escucha y otra muy distinta ser amigo de tu hijo. Un papá que decide ser amigo de su hijo, renuncia a su responsabilidad de formarlo.
7. Que tu enojo no te gane. ¿Cómo puedes perder la calma con la persona que dices querer más?
Shhh… La guía definitiva para enseñarle a tu bebé a dormir
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8. Tu hijo necesita EDUCACIÓN y no sólo escolar, también hablamos de valores, hábitos, creencias, costumbres.
9. Llevarlo a miles de actividades no es ESTAR CON ÉL, estás acompañándolo. Pasa tiempo con él donde puedan convivir.
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10. Tu hijo necesita ATENCIÓN. Disfruta de su compañía. Míralo a los ojos, así crearás además vínculos fuertes.
